05 DE NOVIEMBRE DE 2014
- SENDERISMO -
15,40 kms - 600 m. desnivel - 4:43 horas - fotos - wikiloc - IPB: 52
SE CUMPLIERON LAS EXPECTATIVAS
Eran dos, la primera que la ruta iba a ser muy bonita y la segunda que no sería tan fácil como parecía. Efectivamente, bonita y en algunos tramos espectacular, sobre todo el tramo de la faja tan cerca de los acantilados que no revestían peligro inminente pero que te hacía ir muy atento a la faena. Quizás el exceso de atención hizo mella en algún compañero/a que terminó mas tocado/a de lo acostumbrado.
El día se presentó fresquito, menos de 10 grados y despejado. Después de la llegada de un “dormilón”, los 42 componentes de la excursión nos pusimos manos a la obra. Al poco se va ascendiendo suavemente y van sobrando las prendas de abrigo. El “jefe” se torna loco y pone un ritmo endiablado que va dejando un reguero de cadáveres por el camino, a pesar de ello los “gallitos” del grupo lo rebasan y se van por delante. La senda, de fácil pisar y con continuos sube-bajas de desnivel llevadero, hace que el pelotón se estire y se estire. Después de más de una hora hacemos reagrupamiento y parada para almorzar.
Del almuerzo no comentaré nada, solo diré que “como de costumbre” y dejaré constancia de un manjar que aportó Juan Valera en forma de setas con jamón, ¡¡vaya pasada!!.
A continuación tomamos durante un buen rato una pista en descenso para desviarnos por una senda que bordea la faja que nos devolverá a los coches. Espectaculares vistas. Senda poco pisada con bastantes piedras que hacen pertinente concentrarte en lo que haces debido a la cercanía de los acantilados. Este tramo se hace largo y repetitivo en las vistas. Hay que sortear varios árboles caídos, seguramente por el viento y un par de compañeros se lo pasan bastante mal por sus vértigos.
Al final todos sanos y salvos en los coches. Tomamos rumbo a Cortes de Pallás donde nos esperaba una buena comida en el Bar Chema (633089774). Fuimos atendidos por Dioni con esmero y rapidez dejando muy satisfecho al personal.
Un compañero fue atendido por una bajada de tensión (leve). Otro se dejó las gafas a 15 kms del bar y tuvieron que volver a por ellas. Otro se pagó unas botellas de cava por su santo. Otra llegó destrosá. En fin... que nos divertimos bastante jajaja.
Además del comentario, con todo detalle de lo que ocurrió, sin faltar ni pruna.
ResponderEliminarLa foto de la "finestra" una pasada