domingo, 8 de mayo de 2011

MARCHA VALLES DE AYORA (Ayora)

7 DE MAYO DE 2011



Llegando a meta...


La Peña


Hoy empezaré con el resumen: CINCO empezaron la marcha y solo acabaron TRES. Como de costumbre el Palanca a toda prisa llegó el primero, el Manolo que no pudo pillarlo llegó segundo, el Delfín (de milagro, ya contaré) llega tercero y último. Por el camino el Armando que se tira por los suelos y sale con quemaduras en pierna y brazo, supongo que sin importancia, es joven y lo soportará bien. El JJJJJ se me queda "enganchao" de los lumbares y no puede ni enderezarse en la bici y otro a la ambulancia.

DIARIO DE LA MARCHA. Viernes tarde en Ayora, recogida de dorsales y la pregunta del millón, ¿lloverá mañana?. Parece que lloverá hacia mediodía. Cena espléndida en el Restaurante 77, buen rollo, armonía, preparativos para la marcha y a la cama. Por la noche el JJJJJ se puso morao de roncar, su compañero de cama se marchó al sofá del salón a terminar la noche.
Por la mañana 7:00 horas, no llueve, suelo mojado, hace fresco, viento a montones. Otra pregunta típica ¿de largo o de corto? ¿con chaqueta o con manguitos?. Como si de una orden se tratara, todos sin chaqueta y casi todos de corto. Desayuno y a la salida. No están todos los inscritos. Hay miedo a la lluvia. Se retrasa la salida. Cae alguna gotita. Dan la salida y allá que vamos. Cuando me doy cuenta voy a tope de pulsaciones y no me gusta, levanto el pie y me pasan unos cientos y es que en la salida estaba de los primeros (no lo volveré a repetir).
Los primeros kms pican hacia arriba y me sientan fatal, al JJJJJ lo mismo. Vamos juntos. El pulso se serena y vamos cogiendo ritmo, siempre a rueda. El primer puerto lo pasamos bastante bien y al poco el JJJJ que empieza a quejarse de la espalda, aguantamos el ritmo y no se recupera (normal). Llega un momento que me grita y me dice que no puede incorporarse. Se para, y mira por donde, el Armando que estaba allí, esperando a un furgón que lo lleve para casa. Se había caído bajando la Chirichana, uno que llevaba delante se comió una curva y por no atropellarlo se pegó un morrón. Quemazos en pierna y brazo, maneta de la bici por el aire, ropa para tirar, primeras curas de emergencia y pa casa. El JJJJJ le hace compañía y yo continuo mas solo que la una, a 500 metros el coche escoba y la ambulancia.
Poco a poco vamos haciendo grupos de 2-3-4 ciclistas. Llega el siguiente puerto y cada uno a su ritmo. Lo subo bien a pesar del tramo largo al 10-12%. Una vez arriba me procuro compañía (joven) y a rueda todo el rato.
Entramos en el último bucle, el mas difícil, voy con un par de chavales que me dejan tirao a las primeras de cambio. Sigo a mi marcha y veo el cartel de "empieza puerto". Empieza a llover y me pongo el chubasquero. El puerto se las trae, 12% y mas. Llueve mas fuerte. Siguen los tramos del 12%, alguno hasta el 16%. El viento es muy fuerte. Hay ciclistas subiendo andando. La velocidad no pasa de 6-7 k/h. Ahora "jarrea" y el viento mas fuerte. ¿me paro? ¿donde?. Mas ciclistas andando. Relámpagos y truenos. Sigo así durante 23 minutos que he tardado en subir 2,5 kms (7 k/h de media). No paro en el avituallamiento y continuo. Sigo solo. No puedo correr, los frenos mojados no son de confianza. Hace frío. Voy completamente centrado en la bajada. Voy despacio. Me pasan un par de ciclistas. De momento empieza a GRANIZAR, piedras pequeñas. Sigo, no paro. Graniza mucho mas y tengo que parar bajo un árbol. Hace mucho frío, estoy mojado de la cintura a los pies. Para un poco y me hago el ánimo. A los poco metros vuelve el GRANIZO con mas fuerza y de mayor tamaño. Urgente busco un árbol y me paro. Había un chaval allí parado temblando, no llevaba ni chubasquero. Yo temblaba también. Esto no para chaval ¿que podemos hacer?. El chaval no paraba de decir "esto es una salvajada", "esto es una locura" y otras cosas que no se pueden reproducir. Lo convenzo de que hay que salir y salimos. Regueros de agua inundaban la carretera. Mucho frío. Mas relámpagos y truenos. Como es de bajada no podemos pedalear. Mas frío. Bueno y así hasta que llegamos a 5 kms de la meta que deja de llover fuerte y como es de subida, entramos un poco en calor. Buscamos la meta y no la encontramos, había desaparecido, el viento se la había llevado junto con las alfombras de los chips, las mesas de control y todo lo que había pillado por medio. En Ayora la tormenta había sido de aúpa también. Me estaban esperando mis compañeros de viaje, me duché tiritando y al restaurante a comer. La comida de la organización había desaparecido también con la tormenta. Y ya está, ¡¡¡vaya rollo!!! pero me ha salido así y no lo voy a borrar.
DATOS TÉCNICOS: 150 kms. - 2342 metros de desnivel acumulado - 6:52 horas de pedaleo - 21,9 k/h de media - 6ºC de temperatura mínima - 13ºC de temperatura media.

Dice Armando Serrano

Mi relato contará sólo la mitad de la etapa, que es lo que hice yo. Ahora sabréis porqué. Llegamos a Ayora casi todos a la vez. Un frío importante. El apartamento, de cine. La cena, de lujo. El tiempo, amenazador. El despertador suena a las 6:30 de la madrugada. Nos asomamos y la cosa pintaba mal. suelo mojado, viento, nubes más negras que la conciencia de Francisco Camps (si la hubiere). Al final nos decidimos a salir y salió un buen día para salir en bici (aunque se torció al final para algunos). Temperatura fresquita, pero casi se agradecía.
La salida, cuesta arriba, obligaba a algunos esfuerzos al inicio para no perder grupo, pero sin que se te saliera el corazón. Los primeros 40 kms (más o menos) yendo en grupo son casi un paseo. Con algún repecho que otro, pero sin grandes dificultades. Y con la temperatura de hoy mucho mejor. El primer puerto (y mi único), el de Casas del Río, llevadero. Alguna rampa durilla, pero en total son 7 kms sin excesiva dificultad. Por ahí adelanté a Manolo costa que tenía el día reservón sabiendo lo que quedaba después). Arriba del puerto un avituallamiento bastante bueno: mucha fruta (unos trozos de sandía que fueron un delicia) y unos pastelitos de manzana divinos. Sigo 'palante' tras un pequeño calentón para pillar un grupo hasta llegar al descenso de la Chirichana. Descenso rapidísimo, con carretera ancha y buen firme. empezamos el descenso un grupo numeroso que iba perdiendo unidades por la velocidad. de repente el ciclista que va delante de mí se come una curva, frena en seco, da varios patinazos, y en mi intento de evitarlo me voy al suelo, cuando íbamos a una velocidad importante. Me hago todo el carril de la izquierda por el suelo dejándome la piel de pierna y del brazo derechos, hasta frenar golpeándome con el guardaraíles del otro lado, con la suerte de que en ese momento no subía ningún coche. Me levanto, me veo hecho unos zorros, pero decido seguir. Me subo, con un escozor que no os voy a explicar, y cuando voy a cambiar me doy cuenta de que la maneta está hecha polvo. No puedo seguir. Me dejo caer un par de kms hasta un lugar en que había dos personas de la organización. Llamaron al médico que llegó en una moto de forma casi inmediata y me hizo una primera cura, aconsejándome que en cuanto llegase a Ayora, después de la ducha fuese al Centro de Salud. Y eso hice.
Me subí al primer furgón recoge-ciclistas que pasó, ducha en el hotel y al centro de salud donde me hicieron una cura más completa. mientras esperaba al furgón llegaron Jesús Pascual y JJ. este último llegó completamente enganchado de la espalda, y también se quedó. Y así acabó mi primera experiencia en Ayora. Ahora me he tomado ya el antibiótico, me duelen hasta las pestañas (parece que me haya caído en una hormigonera, coño), y me queman las heridas un pelín.
Al final esperando a Jesús Pascual en el pueblo cayó la mayor granizada que yo he visto en mi vida. Al acabar había en la calle dos palmos de granizo y parecía que había nevado. Ya veréis las fotos. La llegada se puso peligrosa para los ciclistas que restaban por llegar. Delfín llegó empapado y helado de frío. Él os lo contará en su crónica. Esto es todo amigos.

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